Visión
Ser una organización con prestigio nacional que aporte al desarrollo de la sociedad y difunda una cultura de fraternidad, justicia y solidaridad, en todos los ámbitos de la sociedad.

Misión
Somos una organización que fomenta el desarrollo integral de grupos humanos menos privilegiados, en sus diferentes niveles y necesidades, mediante la promoción y generación de acciones y proyectos.

Nos inspiramos en el pensamiento y la doctrina espiritual de Chiara Lubich, caracterizado por promover la unidad y la comunión entre las personas.

Nuestras acciones en diferentes campos están orientadas hacia la fraternidad, reconociendo al ser humano como centro.

El inicio de nuestras actividades el 2008, impulsó principalmente la acción de dos Centros, en los cuales hemos descubierto que son laboratorios de fraternidad, a través de los cuales las relaciones de comunión forman integralmente a quienes pasan por ellos.

La característica principal de los Centros es la de generar relaciones diferentes basadas en una cultura de paz y fraternidad donde constantemente se viva la llamada regla de oro “haz a los demás lo que quisieras que te hagan a ti”. De esta manera, quienes asisten, influyen positivamente en sus familias caracterizadas en varios casos por la pobreza, alto índice de alcoholismo, violencia y otras, de manera que el diálogo y empatía sean sus principales herramientas.

Favorecemos que el aprendizaje tenga un significado y sea puesto al servicio, mediante la metodología del aprendizaje-servicio, a través de la cual los chicos influyen positivamente en su comunidad mediante proyectos llevados adelante por ellos mismos.

Adherimos al proyecto “Hambre Cero” de la FAO, la cual pidió ayuda a los adolescentes del Movimiento de los Focolares para vencer el hambre del mundo, quienes han respondido inmediatamente con decisiones de acción poniendo en común la cabeza, el corazón y las manos. La entrega de alimentos a quienes más necesitan y la generación de huertos en las casas es una acción que estamos impulsando en respuesta a esta propuesta en el escenario particular de la pandemia.

Propiciamos el desarrollo de una nueva cultura económica caracterizadas por la comunión, la gratuidad y la reciprocidad, proponiendo y viviendo un estilo de vida alternativo al dominante en el sistema capitalista, basada en la “cultura del dar” que permita enfrentar las distintas formas de indigencia, exclusión y miseria con una doble inclusión: comunitaria y productiva.

Creemos que la ciudadanía participativa y responsable es posible, generando puntos de encuentro y de diálogo abierto para contribuir a la construcción de un orden social y político más justo y fraterno.